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Cuenta regresiva para definir al nuevo presidente

VIDEO | Sin candidatos atractivos dignos de asumir y a seis meses de las urnas, el ánimo de los votantes es desolador

6 de cada 10 coinciden en que Gabriel Boric debe ser reemplazado en la presidencia, pero no se sienten representados por ningún candidato. ¿Qué sucederá en las elecciones que se avecinan? (Dibujo: NOVA)

El próximo 16 de noviembre, los ciudadanos del país decidirán quién sucederá a Gabriel Boric en la presidencia. A seis meses de los comicios, las encuestas muestran que la mitad de los votantes aún no define su preferencia.

No obstante, Evelyn Matthei, candidata de centro-derecha, lidera las intenciones de voto con un 20 por ciento, seguida por José Antonio Kast, representante de la derecha. En un tercer lugar más rezagado está Carolina Tohá, exministra de Boric y miembro del Partido por la Democracia (PPD), quien comparte espacio con otro aspirante de derecha.

En este escenario, la izquierda se organiza para unas primarias con cuatro candidatos, incluida Jeannette Jara, exministra del Trabajo y militante comunista. Aunque la derecha y el centro-derecha lideran las preferencias, la falta de acuerdo para una candidatura unificada o primarias conjuntas genera incertidumbre en su estrategia electoral.

Según los sondeos, Matthei o Kast avanzarían a una segunda vuelta, probablemente enfrentándose a Tohá. Las proyecciones indican que Matthei superaría a Tohá con claridad en un balotaje. Sin embargo, si Kast llegara a la segunda vuelta, la contienda con Tohá sería más reñida. Cabe destacar que Kast, quien en 2021 perdió ante Boric por 9 puntos porcentuales, podría capitalizar el descontento actual, ya que la inseguridad y la percepción de un gobierno débil inclinaron a parte de la población hacia posturas más conservadoras.

Mientras tanto, el gobierno de Boric enfrenta múltiples obstáculos. Filtraciones recientes de audios han ligado al presidente a investigaciones por posible financiamiento ilegal de campañas y uso indebido de fondos públicos. En este contexto, Boric decidió viajar a Japón y China para proyectar una imagen de liderazgo global, una movida criticada por quienes consideran que debería enfocarse en los problemas internos.

Además, la gestión de Boric ha sido cuestionada por su manejo de las relaciones con China y Estados Unidos, socios comerciales clave del país. Algunos señalan que el mandatario adoptó posiciones que exageran la relevancia global del país, que tiene un peso limitado en el escenario internacional. Una postura más neutral sería más adecuada para evitar tensiones externas.

Los desafíos internos son urgentes. La ciudadanía destaca seis prioridades: la inseguridad, la inmigración irregular, el colapso de los sistemas de salud y educación, la falta de infraestructura y la paralización de grandes proyectos por regulaciones excesivas. Atender estas demandas es esencial para recuperar la confianza pública.

El Gobierno de Boric, que prometió una transformación profunda, enfrenta críticas severas. Muchos consideran que su administración ha carecido de experiencia y profesionalismo, acumulando errores que han debilitado su gestión. La percepción general es que su paso por el poder será recordado por una mezcla de arrogancia e ineficacia, con pocos logros destacables.

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