Según el fiscal, la investigación chilena inicialmente apuntó a un ajuste de cuentas entre delincuentes, pero luego, sin evidencia clara, viró hacia una narrativa que responsabiliza a Venezuela. “Basta de mentir y utilizar a Venezuela para favorecer el relato contra nuestra democracia”, sentenció.

El persecutor venezolano fue más allá y apuntó directo al corazón político de Boric, acusándolo de ser “la continuidad del pinochetismo”. Según Saab, el mandatario chileno “le entregó el manejo de riquezas chilenas al yerno de Pinochet” y traicionó el legado de la juventud que protestó contra Sebastián Piñera.

También lo acusó de maniobrar para marginar a Daniel Jadue, exalcalde de Recoleta, imputado por cohecho y fraude, a quien calificó como “el mejor alcalde de todos los tiempos en Chile” por su gestión en Farmacias Populares.

Saab remató asegurando que Boric “desaparecerá pronto del mapa político chileno por la puerta trasera”, aludiendo a su baja popularidad. El fiscal defendió su trayectoria en derechos humanos y pidió no usar a Venezuela como chivo expiatorio en el caso Ojeda, que sigue sin resolución definitiva.