Marcelo Mella se lanzó contra Jara y aseguró que la izquierda fracasó por su "incapacidad" para "resolver problemas"
A pocas horas de conocerse el resultado de la segunda vuelta presidencial, el cientista político Marcelo Mella ofreció una lectura crítica sobre la derrota de Jeannette Jara, candidata del oficialismo.
Para el académico de la Universidad de Santiago, el revés no se explica solo por la campaña, sino por un cuadro más profundo que afecta a la izquierda chilena desde hace años.
Mella situó parte del fenómeno en un contexto internacional marcado por el avance de la ultraderecha, que instala un clivaje entre ciudadanía y clase política tradicional.
Según explicó, ese discurso se alimenta del malestar acumulado por problemas estructurales no resueltos, como desigualdad, pobreza, exclusión social, deficiencias del Estado y crisis de seguridad, que han persistido durante décadas sin respuestas efectivas.
En el plano interno, el analista fue directo al señalar un cansancio con los gobiernos progresistas en Chile, a los que calificó de ineficaces para enfrentar demandas históricas. A ello sumó la inseguridad y la migración como flancos débiles de la izquierda, que han erosionado su credibilidad ante amplios sectores del electorado.
Respecto del Frente Amplio, Mella sostuvo que tampoco logró revertir esa percepción durante el Gobierno del presidente Gabriel Boric, quedando atrapado en debates que la opinión pública considera sin solución. En ese escenario, la figura de Jara quedó asociada a una continuidad gubernamental mal evaluada.
De hecho, el académico afirmó que esa vinculación resultó más perjudicial que su militancia comunista. Destacó que su votación creció en más de un millón de votos en segunda vuelta, lo que, a su juicio, demuestra que el problema central fue la imagen de un Ejecutivo considerado fracasado por una parte relevante del país.
Para Mella, la caída electoral no es coyuntural. La atribuyó a un proceso iniciado tras las movilizaciones estudiantiles de 2011, cuando los partidos tradicionales de izquierda comenzaron a perder adhesión, reduciéndose hoy a colectividades que no superan el diez por ciento. Desde esa perspectiva, concluyó que una campaña no podía revertir una crisis de más de una década.







Sigue todas las noticias de NOVA Chile en Google News











